Tallarines de pescado con alma, el proyecto que ha unido a Ángel León con Scolarest y Pescanova
El 24 de enero es el día en que ve la luz Fish Revolution para cambiar la forma de consumir el pescado en los comedores escolares de la mano de Ángel León, Scolarest y Pescanova. El proyecto llegará a los centros que gestiona Scolarest en toda España en esa fecha con motivo de la celebración ese fin de semana del Día del Pescador.
Ángel León marcó el punto de salida de esta propuesta gastronómica, junto a otros proyectos innovadores, durante su presentación en Madrid Fusión Madrid de 2020. Partir de ese día arranca una nueva forma de consumir pescado a través de platos elaborados que disimulan aspectos como la apariencia, el sabor o el olor. Queremos mejorar la alimentación de los más pequeños y familiarizarlos con el pescado mientras disfrutan de recetas de Estrella Michelin.
Nuestro objetivo es acercar a los niños esta revolución conceptual para que coman pescado presentado de formas muy variadas, desde pasta o pizza hasta lomo o muslos de pollo hechos a partir de pescado. De esta manera, mientras el producto tiene esta apariencia, está aportando todos los beneficios de la proteína marina. Angel León ha destacado que este innovador proyecto de I+D Gastronómico es “fruto de mucho trabajo y de la convicción de que podemos hacer que nuestros hijos coman mejor, y esto de la mano de Compass Group va a ser posible ya que tenemos un impacto en más de 100.000 familias en toda España”.
La primera propuesta presentada para arrancar este proyecto en los centros de Scolarest son los Tallarines de Pescado que se comieron en el Fish Revolution Day. Están elaborados a base de materia prima marina, en este caso merluza, complementando así la oferta de pescados presentes en el menú. Además, esta elaboración no contiene ciertos alérgenos como es el caso del gluten, lo que supone una gran ventaja. El objetivo es que los alumnos puedan, sin modificar sus hábitos y rutinas alimentarias, degustar una vez al mes esta propuesta disruptiva.
Podemos afirmar que ha sido todo un éxito dada la buena acogida entre los niños y la naturalidad con la que han comido el plato de tallarines sin conocer que eran de pescado. Este proyecto sólo se desarrolla en los centros gestionados por Scolarest, yq que contamos con la exclusividad de la receta y del producto.